MÁS ALLÁ DE LO CONOCIDO, LATE LA GRACIA DIVINA
Comentario al Evangelio del 2025-09-01
Lunes XXII semana del Tiempo Ordinario
Bueno, mira que curioso. Jesús regresa a su pueblo natal, Nazaret, y en la sinagoga lee un pasaje de Isaías que habla de liberación y esperanza. Al principio, todos le escuchan con admiración, pero pronto su corazón se endurece. ¿Por qué? Porque Jesús les desafía con una verdad incómoda: Dios no está limitado por fronteras o tradiciones.
Como en el concepto japonés de ‘serendipity’ (descubrimiento inesperado), Jesús les recuerda que la gracia divina puede manifestarse donde menos se espera. Cita ejemplos del Antiguo Testamento donde Dios eligió a extranjeros —una viuda de Sarepta y Naamán el sirio— por encima de los propios israelitas.
Es un mensaje poderoso sobre los peligros de la cerrazón: cuando nos aferramos solo a lo que conocemos, perdemos la capacidad de asombro. La fe no es un territorio cerrado, sino un camino abierto de sorpresas y encuentros.
¿Te atreves hoy a mirar más allá de tus prejuicios? Abre tu corazón a lo inesperado.