HAZTE PEQUEÑO Y CAMINA BAJO LA MIRADA DE TU ÁNGEL CUSTODIO
Comentario al Evangelio del 2025-10-02
Santos Ángeles Custodios memoria obligatoria
Hoy, en la fiesta de los Santos Ángeles Custodios, Jesús nos pone delante a un niño. Y, mira, no es por ternura barata: nos recuerda el camino al Reino. Hacerse pequeño es recuperar la inocencia que no sospecha mal, la capacidad de asombro, la sinceridad que dice la verdad sin doblez, la simplicidad de un kokoro sin máscaras. La verdad es que, con la edad, vamos armándonos de defensas y perdemos esos tesoros.
En Japón, muchos padres cuelgan un omamori en la randoseru; es un gesto sencillo que dice: “no caminas solo”. Jesús lo dice con más profundidad: “sus ángeles ven siempre el rostro de mi Padre”. Tu vida y la de cada pequeño están custodiadas desde el Cielo; por eso, acoger a un niño en su nombre es acogerlo a Él.
Hoy, ora como un niño: Señor, Tú primero; enséñame a escucharte y a confiar en tu cuidado, también a través de mi ángel custodio. Y, bueno, haz algo concreto: mira el mundo con asombro, defiende a un pequeño, pide perdón con sinceridad, agradece sin cálculo. Pidámosle al Señor un corazón pequeño.
