EL AMOR FLORECE EN LIBERTAD, COMO EL CEREZO EN PRIMAVERA.
Comentario al Evangelio del 2025-07-24
Jueves XVI semana del Tiempo Ordinario
¿Sabes? Hoy Jesús nos habla de algo muy profundo: el respeto a nuestra libertad. Él no fuerza, no impone, sino que siembra su mensaje en parábolas, como quien planta semillas en un jardín. Y, mira, esto me recuerda mucho al concepto japonés de «間» (ma), ese espacio vacío que permite que las cosas respiren y crezcan. Jesús deja ese «ma» en sus palabras, para que cada uno decida qué hacer con ellas.
En Japón, el cerezo (桜, sakura) no florece por obligación, sino cuando está listo, en su tiempo. Así es el amor de Dios: no aprieta, sino que espera. Porque el amor, como bien dice el Evangelio, solo es posible en libertad. Jesús no quiere oyentes sumisos, sino corazones que elijan amarle libremente, como el samurái (侍) elige su camino con honor.
Y tú, ¿cómo escuchas sus palabras? ¿Con un corazón abierto o cerrado? Hoy, toma un momento para reflexionar: ¿hay áreas de tu vida donde resistes su voz? Quizá es hora de dejar que su amor entre, libremente, como la brisa entre los bambúes (竹, take).
**Call to Action:** Hoy, elige una pequeña acción que refleje tu libertad para amar. Tal vez perdonar, escuchar a alguien, o simplemente agradecer. Pequeños gestos que muestren un corazón libre para Dios.